En vivo y en directo, con Jose Jones.


"- Y ahora. Aquí. En vivo y en directo. ¡El mismísimo Jose Jones!
- Bueno, yo sólo soy uno de los tres... (Por lo bajo). Buenas tardes público.
- Cuánto tiempo intentando concertar esta entrevista, por lo visto la identidad de Jose Jones, debido a su turbio pasado, era difícil de desvelar. Le rodean millones de acusaciones policiales y amenazas de muerte de madres y padres de sus fans más jóvenes.
- Bueno, algunas de esas acusaciones son infundadas. Se deben al miedo que produce la sola mención de mi nombre. Ya me acusan por todo.
- Eso esperamos todos, que salga todo muy bien. Por cierto, desde cuándo existe Jose Jones?
- Bueno, como ya he dicho.. Yo soy solo una tercera parte de lo que es Jose Jones.
- ¿Como es eso?
- Bueno, sí. Jose Jones somos tres personas. No soy solo yo. En definitiva es una mente mucho más compleja, difícil de cazar entera.
- Creo que no le entendemos.
- A ver, es muy simple. La complejidad de lo que inicialmente se concibió como Luas y sus Problemas es fruto de una mente de triple complejidad, no podía ser una sola persona. Jose Jones somos tres. Yo soy solo uno.
- ...
- ¡Váyase a la mierda usted subnormal! ¡Y a la mierda el público también! Arderán todos en vivo y en directo."

La mecha prende fuego y todo el teatro principal revienta en pedazos. La filmación en directo capta todo el momento de la ignición. Un estadio de fútbol se desmorona por la onda expansiva cuando el equipo local iba perdiendo. La ciudad se sume en el silencio absoluto y una tercera parte de Jose Jones sale caminando entre las ruinas camino a otra localidad. Es hora de ir a un motel y escribir la 6ª temporada de Luas y sus viajes y fracciones.

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Luas y sus traducciones.

"Así es. Después seré un personaje en otro idioma y todo será traducido. Las gafas traducidas, el semen traducido, la colmena traducida y javichulo traducido. Todo traducido. Traducido. Traducido. Traducido. Y sobretodo traducido.

Mama, ¿hemos llegado ya? Necesito ser mas oscuro con mi retórica. Alma de cordón. Sabana de lino. Voy a estudiar para el examen de ocultismo y así jamás me encontrareis, bastardos.
Dominaré el mundo a base de retórica, y lo haré en miles de idiomas, en todas vuestras casas. Os dominaremos y no os dareis cuenta, al estilo de un maestro.
Depende del traductor el énfasis en la retórica, y google parece un buen aliado. No hay que andarse con chorradas en estos temas. La expansión por la red está ahora mismo bloqueada."

La traducción era malisima y los productores se tiraban de los pelos. Javichulo no estaba presente, pero si lo hubiera estado, todo esto sería diferente. Entonces, Luas golpeó la mesa, se puso de pie y enérgicamente se pronunció:
-Queridos empresarios, ésta no es una forma honrada de llegar a la fama, ¿Estamos acaso perdiendo el buen rumbo?
Se levantó el murmullo en la sala, solamente se atrevió a hablar el encargado de la limpieza, quien en ese momento, estaba libre de sospechas de tener cualquier tipo de inteligencia.
-Ya lo creo, Luis.
Los empresarios abrieron los ojos como platos, la agitación aumentaba y las miradas iban de unos a otros buscando un ápice de comprensión. "Se llama Luis..." Decían algunos. "Luas es un nombre secreto..."Apuntaban otros. El revoloteo en la sala comenzó a hacerse insoportable.
-Luis Stefan Gutson Ruiz. - dijo el barrendero masticando las palabras.
Luas le miraba fijamente, sin prestar especial atención a la incredulidad de sus compañeros empresarios.
-Sebastian - Dijo por fin Luas. -Has desmejorado con el tiempo, pero he reconocido tus pectorales.
Sebastián soltó la escoba y la mirada estúpida se metamorfoseó en lucidez, en mirada de refinado catador de vinos, observando la situación. Había salido de su disfraz.
-Sabes Luis - Los empresarios volvieron a agitarse, ahora menos interesados por Luas, volcaron su atención hacia este nuevo individuo - la ultima vez que nos vimos eramos primos. La próxima vez quizá seamos extraños, y así pasan los años. Pero henos aquí hoy, en esta sala de juntas, discutiendo trivialidades y banalidades sobre la serie que empecé YO. ¿Cómo coño pretendes controlar todo esto? Fíjate bien, te has rodeado de retrasados mentales - Crece la agitación de los presentes "¿Pero qué cojones está diciendo?" - . Sí, retrasados mentales, subnormales, gilipollas, inútiles, lamesuelas pendencieros. En definitiva, escoria.
- ¡Oiga! - El individuo que se sentaba a la derecha de Luas se levanta y se dirige a Sebastian - ¿Quién se ha creído que es? No le permito que...
Sebastian apunta con su dedo a la garganta del hombre, que al instante se queda sin voz. Su boca se mueve, pero no emite ni un solo sonido. El hombre sigue hablando como si nada y mira a sus compañeros esperando una respuesta. Todos le miran extrañados durante un buen rato, así que no se dan cuenta de lo que ocurre en la sala. Sebastian y Luas se han levantado y se abrazan efusivamente.
- ¡Cuánto tiempo Sebastian! Te creía muerto, ¿Sabes? Dijeron que tu cuerpo ardió con las mismas llamas que arrasaron el antiguo edificio de la compañía. Por eso decidí mandar construir este, y continuar con tu legado.
- Ya deberías saber que no es fácil acabar con el Nigrojaque, muchos lo han intentado y la mayoría han perecido.
- ¿Nigrojaque? ¿Sigues con esas tonterías?

De repente, sin previo aviso, el hombre que seguía intentando que sus compañeros oyeran su voz explotó. Cuando hablamos de que alguien explota nos podemos referir a muchas cosas. En este caso el cuerpo del hombre explotó, reventó, y las tripas y extremidades, como metralla, golpearon a los demás. Toda la vidriera crugió de arriba a abajo para acabar haciéndose añicos, dejando la sala de reuniones de la planta 230 del Edificio Luas & Cía completamente abierta al exterior.

- ¿Tonterías? Ahora verás lo que son las tonterías.
Los compañeros de Luas lo están flipando, el Nigrojaque con los ojos inyectados en sangre se gira hacia ellos y les mira. Con un movimiento de ojos los va lanzando todos al exterior, desde la calle se les puede ver volar e ir cayendo sobre el asfalto. El Nigrojaque se ríe a carcajadas y mientras sigue lanzando a gente a través de las vidrieras le dice a un asustado Luas.

-Dime, ¿Qué pretendes con esta mierda de Luas y sus traducciones? Es puta basura. No estás listo para llevar esto, tú también eres un inútil. Te voy a decir como manejaremos este asunto, ahora tienes que llamar a Javichulo.
- A ver, por partes. Me ha cabreado lo que acabas de hacer con toda esta gente. ¿A caso vas a ser tu quién va a recoger toda esta mierda?¿eh, encargado de la limpieza? Mira, aún hay gente que está cayendo, que no ha llegado al suelo. ¿Crees que alguno de los que has lanzado sobrevivirá? Joder, en serio. No te soporto. Siempre igual. Ahora tendré que buscarme a otros besugos para llevar esta empresa adelante. Mira que el alquiler del edificio me cuesta millonadas... ¿Y que es eso que dices de Javichulo? Javichulo lo matastes tu hace tiempo ¿no recuerdas? En fín...

Entonces Luas, bastante molesto, se dirige hacia su sillón para informar a la secretaria a través del interfono. Sin duda, necesita una nueva junta para sus traducciones. Nuevas ideas, mentes creativas para llevar a cabo tal pantomima. Aunque tendrá que dar una explicación de tanta mortandad, en el fondo está contento. Eran todos unos besugos.

- Venga Luas, si sabes que haga lo que haga, al final acabarás saliendo impune. Sin ti no hay historia. Sin ti nada de esto tiene sentido. Debería haberte matado a ti en lugar de Javichulo aunque habría sido más aburrido. ¿Sabías que Javichulo te estaba engañando?
- ¿¿¿Quéeee!!! ¿Engañando en que sentido?
- En un sentido metafórico, jajaja. ¿A ti que te parece?
- No se, dimelo tu.
- Javichulo tenía UNA amante.
- Jajajaja, que gracioso eres Sebas. Siempre fuistes el más gracioso en la escuela. Incluso el sacerdote lo decía. Por eso eras el que recibías más latigazos. Le debías caer bien - Dice Luas esbozando una sonrisa.
- No Luas. Esta vez va en serio. Si he vuelto a aparecer de entre las sombras es para traerte conmigo. Se acabó esta absurda pelea. Se acabó, ya no soy el malo en ésta historia.
Luas, que no esperaba nada de ésto, se vio inmerso en una situación de lo más brusca. Un fuerte clanck y una alarma de coche dieron la señal (el último hombre había llegado al fin a su destino, la luna trasera de un mercedes de los 70), y con ella, Luas había tomado ya su decisión.
-De acuerdo.- contesto sin más. - A Partir de ahora tu y yo seremos uno.
Sebas sonrie y llama a la nueva secretaria por el interfono.
-Estrella, podrías subir un momento?
Luas miró al Nigrojaque, sabía cuales eran sus intenciones. Dijo:
-La mataré si con eso consigo tu confianza, hijo de puta. No me costará nada. ¿Acaso no recuerdas quién soy? Soy Luas Stefan, cada vez que hablo muere gente.
Tonk Tonk, se abre la puerta y aparece Estrella, con un vestido rojo, de escote afilado.
- Si?...- Pregunto. Sebas habla:
- ¿Conoces a este hombre? - Y señala a Luas.
- No, no sé quién es. ¿Quién es?
- Yo.. Yo.. - Luas tartamudea, incapaz de articular una sola palabra. Entonces el Nigrojaque, que se ha estado poniendo su capa negra interrumpe sus balbuceos.
- Bueno, yo debo partir - Con un movimiento de brazo se aparta la manga para observar su Rolex de oro -. Si no me voy ahora, corro el riesgo de perder mi tren, vuelvo a casa para pasar el fin de semana con mi esposa y mis hijos.
Se encaja un sombrero hongo en la cabeza y con él saluda a la dama, entonces dirige la mirada hacia Luas y sin emitir ningún sonido articula la palabra "Muerte" muy lentamente. Luas sostiene su mirada desafiante; la cosa podía acabar muy mal.

Esta situación me resulta un poco incómoda. Sebastián no me había dicho que se tuviera que ir, me ha traído en su coche y me ha prometido que cambiaría mi vida aquí y ahora. No esperaba que me dejara sola en la planta 230 de un edificio de cristal, con un tío tan raro. Su mirada me da miedo, no sé qué pretende. Siento que le conozco, pero no consigo encajar su cara en ninguno de mis recuerdos. Siento algo extraño, mis bragas empiezan a humedecerse, y con esta falda tan corta tengo miedo de que se pueda notar algo. Este hombre me pone cachonda perdida. Debería calmarme, creo que estoy empezando a sudar y estoy hiperventilando, oh dios mío... Se va a dar cuenta... ¿Pero por qué no dice nada? Me está mirando los pechos constantemente, pero no dice nada de nada. No puede ser, el aire sopla tan fuerte aquí arriba que parece que estoy apunto de salir volando, sin embargo cada vez estoy más y más caliente. ¿Quién cojones es esta persona? ¿Por qué siento esta atracción? Uf, creo que si sigo así voy a desamayarme.

Los pensamientos se arremolinaban en la cabeza de Estrella, con tal velocidad, que el transcurso de unos pocos segundos se le antojaron horas, y la mirada penetrante de Luas le pinchaba en el corazón que sangraba por dentro. Quiso hablar pero no pudo, la cabeza maquinaba tan deprisa que no podía hacer nada más. Estaba ida.
- Soy Luas. Nos conocemos.
Una flecha atraviesa el cerebro de Estrella:
- Luas...
- Sé como te sientes. Ahora mismo es como si estuvieras leyendo una novela. Estás en la página 277 y saltas a la 280. Como la última frase ha concluido, continúas leyendo sin darte cuenta de nada. Así como avanza la lectura, pero no inmediatamente, las cosas empiezan a descuadrar y notas que algo falla. En estos casos es fácil darse cuenta y volver una página atrás. Lo bueno de los libros es que se puede retornar. Pero tú no puedes volver atrás, ahora mismo estás perdida. Vamos a coger el ascensor y bajemos, daremos una vuelta en coche.

Estrella se encuentra absorta. Luas la coge del brazo y la acompaña hacia el ascensor. Aprieta un botón con una flecha que apunta al suelo y se cierran las puertas. Luas. muy serio, tiene la mirada fija en la abertura de la puerta, esperando ansioso a que el más mínimo movimiento de la misma, le de la señal de salida. Estrella, confundida, miraba a Luas de reojo disimuladamente. En una de éstas, Luas se percató:
-Cata miniña.- Dijo con una voz extraña, quizá algo sixtólica.
Se abre la puerta y Luas la coge de la mano y sale rápido de allí. El hall principal de la planta baja del edificio Bankinter estaba lleno de gente, haciendo sus labores cotidianas como cualquier Miercoles por la mañana, pero ellos lo atraviesan en dirección a la salida con mucha prisa y con torpeza. Luas está nervioso y se le nota. Y cuando Luas se pone nervioso, se pone agresivo. Al fin llegan a la puerta principal. La lleva cogida de una muñeca.
-¡Ey! ¡Oye!- llamó su atención Estela. - ¡Me haces daño!
Luas la ignora metiendole tal patada a la puerta que todo el personal se paralizó durante unos segundos, silencio total y bajan las cotizaciones: Cae en picado la confianza de los inversores en Bankinter.
Al fin fuera, hay un "Twingo" rojo, medio destrozado y lleno de tierra, esperando con el motor encendido, dentro, Miki de traje, con cara de compadre:
-¿Que pasa chorvo? ¿Quién es esta Chorva?
-Soy Estrell...
Le interrumpe la mano de Luas de un bofetón que casi le desencaja la mandibula.
-Miki, escuchame bien. Tu te encargarás de esta puta. Me voy pitando a por el Nigrojaque.
Luas coge a Estrella del pelo y la mete en el maletero de un tirón, entonces sale corriendo calle abajo. Los peatones no vislumbran más que una estela de colores que se mueve a alta velocidad; la NASA estudia el fenómeno, Luas al borde de la incandescencia.
Miki saca el coche de su aparcamiento mientras silba la melodía de El bueno, el feo y el malo: "Y eso que no es mi cumpleaños, gracias Luas". Conduce hasta el descampado más cercano, y una vez seguro de que nadie puede verle saca su revolver de la guantera y sale del coche. Cuando el maletero se abre, lo primero que ve Estrella es un cañón apuntándole a la cara, y la sonrisa de Miki brillando a la luz del sol. Miki la vuelve a agarrar del pelo y la pone de rodillas en el suelo.
- Lo siento chorba. Aquí se acaba todo. - Amartilla el arma y presiona con ella la sién de Estrella. Las lágrimas caen sobre las malas hierbas y el orín resbala por las medias de la chica. Entonces Miki estalla en una carcajada y se guarda el arma en los gallumbos, también le resbalan lágrimas por las mejillas de la risa. Jodido sentido del humor.
- Tranquila chorba, siempre había querido hacer eso. Aunque estoy dispuesto a que me hagas una mamada si vas a sentirte...
FLAP FLAP FLAP FLAP... Un helicóptero armando gran estruendo irrumpe en escena, cogido a la escalerilla que cuelga del aparato está Borjamari. Tiene el mismo aspecto de siempre, ¿Los años no pasan para él?. Sobre el sonido de las hélices puede oírse su voz:
- ¡¡MIKI!! ¡¡NO LO HAGAS!! ¡ESTÁ A PUNTO DE TENER UN HIJO!
- ¿Qué? No te entiendo Borja.
- Que está a punto de tener un hijo.
- A vale, ahora si. Es que no se leer mayusculas. Y bien. ¿Para eso tanto ruido?

Entonces, entre tanto griterio, el Helicoptero consigue aterrizar y Borjamari toma tierra. Ese helicoptero está pilotado por Chension. No diremos nada de él ya que de momento es irrelevante para la historia. Centremonos mejor en la conversación de Miki y Borjamari.

- ¿Qué pasa menda? Jajaja - dice Borjamari abrazando a Miki después de tomar tierra firme y bajarse de la escalerilla. Miki que hasta ahora no se había movido del sitio le pega un empujon a Borjamari apartandolo de su cuerpo.
- Tioooo. Que esta cerda me la iba a chupar... ¿porque me interrumpes con tus gilipolleces?
- Joder. Tio. Que... va a tener un hijo.
- ¿Tu eres retrasado o que te pasa?¿Ves que esté embarazada?¿A caso llavo algo en su utero? - dice Miki todo alterado. La cosa se pone fea.
- Joder, ¿y ese liquido de entre sus piernas que es?¿no ha roto aguas?
- No, me he meado encima so bobo - grita Estrella secandose las lagrimas.
- Si, que no te enteras - dice Miki, más tranquilo, mientras se desabrocha los pantalones.
- Hola Miki ¿Qué tal...? - exclama Chensio que se ha quitado el casco de piloto.
- ¡Dejame en paz! - dice Miki.

Pues si, Estrella se puso a chupar cómo si de una peli porno se tratase. Limpio la manguera de Miki y de rebote la de Borjamari. Chensio no dejaba de comer pipas mientras miraba. Aún así, Borjamari no había dicho nada con respecto a su reacción tan esotérica pero vamos, la chavala estaba rica y no quería desaprovechar una ocasión así ya que Miki todavía no tenía la intención de matarla. Resulta aquí pues que surgió el milagro. Efectivamente Estrella estaba embarazada.

- Miki, no puedes matarla. Va a tener un hijo. Déjame que te explique... - Borjamari minutos después de correrse en la cara de la chica.
- ¿Otra vez?¿A que te pego un tiro a ver si te callas de una vez? - Miki amenazador mientras vuelve apuntar a la chica. Estrella está destrozada. Le han hecho de todo, y aunque ya no está caliente, se siente cómo una piedra usada por todos los honderos de la historia.
- Mira, te lo voy a traducir. Está embarazada de Javichulo. Cuando se...
- ¡Javichulo! - grita Estrella
- Javichulo - Miki pasmado
- ¿Javichulo? ¿Quién es Javichulo? - Chensio mientras salta a la comba.
- ¡¡¡Callate!!! - exclaman los tres.
- ¿Cómo sabes lo de Javichulo? ¿Dónde está? - estirando de los pantalones a Borjamari desde el suelo momentos después.
- Javichulo está muerto, dentro de poco estarás con él - sonrie Miki
- No. Javichulo vive, aunque ese es otro tema. Estás embarazada de él - afirma Borjamarí.
- Pero... ¡si nunca me toco! Sólo me beso la frente cómo un padre. Me dijo que me protegería del Nigrojaque y que acabado todo viviriamos juntos hasta nuestras muertes... - dice aturdida Estrella.
- Bueno, la Virgen María tampoco folló con San Jose y mira donde hemos ido a parar todos ¿no?- comenta Borjamari mirando al cielo.
- Ostras... ¡la ostia! Es verdad... jajaja, que agudo... - dice Miki con la boca abierta.
- Claro que es verdad. Además, me lo ha dicho el Nigrojaque. Vengo de parte de él - aclara Borjamari
- Pero has dicho que estaba "a punto de tener un hijo" y yo no tengo ni barriga... - dice Estrella.
- Claro. Tienes razón, Estrella. Mira que estar a punto de picar con lo de la virgen María. Voy a matarte - vuelve a decir Miki empuñando de nuevo el arma.
- Dios, no piensas Miki. ¿Por qué vas a matarla si se puede saber? - dice Borjamari nervioso.
- Pues, pues... no se. Luas me ha dicho que me encargara de ella. Y viniendo de él, pues supongo que quería que la matara. Luas sólo quiere muerte y venganza. Desde el primer momento de su serie que se lo follaron todos.
- Miki, no cambiaras, en serio.

Entonces, os preguntareis. ¿Alguien me puede traducir esto? El Nigrojaque inicialmente parece que quiere la muerte de Estrella. Luas para intentar afianzar su estatus y llegar a ser peor que él, pretende matar a Estrella para hacerse con la amistad del Nigrojaque y después, matarlo. Sin duda, esto es peor que una peli gore. Pero, entonces, ¿qué sentido tiene todo esto? ¿de que habla Borjamari?¿Cual es la intención del Nigrojaque impidiendo la muerte de alguien que ya está muerto? La muerte de una chica que está embarazada sin estar embarazada. Embarazada de un muerto que ni siquiera tuvo sexo con ella. Un muerto que por lo visto está vivo. ¿Y que cojones pinta Chensio en esto?

La sexta temporada de "Luas y sus problemas" terminaba con estas preguntas en voz en off acompañadas de unos videos de sexo entre animales. Segundos después de rodar esto, los guionistas llamaron a Jose Jones que llevaba años atado a la cama de un manicomio de Tijuana para que volviese a interpretar el papel de Javichulo. En cuanto a Javichulo, cómo nadie sabía realmente si en ese momento estaba vivo o muerto por lo que habían dicho el Nigrojaque y Borjamarí, cómo solución inicial, los guionistas decidieron que en la séptima temporada el papel de Jose Jones de momento también sería interpretado por el propio Jose Jones. De la noche a la mañana un perturbado pasaba de ir todo el día drogado para no tener más problemas de inconsciencia a vivir un caos mental con dos papeles en la serie de su vida. Menudo problema iba a resultar esto para todos.

En ese mismo momento, Luas estaba de camino a la granja, una pequeña parcela en las afueras que heredó de su abuelo al morir éste. A él no le gustaba mucho el sitio, por lo que evitaba ir a toda costa, pero los esclavos centroafricanos que tenía malpagados allí cuidando su cultivo de marihuana sonaban preocupados por el teléfono movil.
En el trayecto en tren, se encontraba con la cabeza apoyada en el cristal. Las vibraciones del vidrio producidas por el traqueteo del transporte lo mantenía en un estado de atolondramiento en el que no notaba apenas el fluir del tiempo. Durante horas, pensó. Luas pensó sobre su vida, sobre los objetivos y sobre la experiencia, sobre el tiempo, sobre el camino. Recordó un viejo proverbio que no era chino, no recordaba de donde:

Apunta a la Luna, y le darás al águila.

Lo recordaba siempre que iba a la granja, ya que se lo había dicho su abuelo cuando era pequeño, quizá a modo de consejo compensativo por meterle en un orfanato, negándole la posibilidad de ser su tutor legal.
Pensó en su vida desde el "mirar al pasado". ¿Qué tengo del pasado? ¿Que me queda? Parecia incuestionable que lo primordial era la experiencia pero, ¿qué era la experiencia, sino toda una gama multiforme de problemas ya superados? ¿No era acaso "eso" lo que le deparaba el futuro?¿Una serie de problemas a resolver? Se dio cuenta de que ya iba por su sexta temporada. Pensó en todo lo que había llovido desde su affair con los raperos, como había cambiado todo, y sin embargo él seguía siendo el mismo. ¿Ésto es madurar? Dudó un momento entre la opción de que sí, de que es algo por lo que todo el mundo pasa en algún momento, pero no tardó en llegar al a conclusión de que no todo el mundo madura, y de que todo el que lo hace lo lleva a cabo a su manera. Pasado y futuro, problemas resueltos, antiguos dolores de cabeza y problemas en su destino. Por la dinámica que tenía su vida desde hace un tiempo, podría haber asegurado que algún problema surgiría en la granja. ¿Qué eran el pasado y el futuro si no una serie de presentes ordenados cronológicamente? Luas tenía muchas preguntas, y pocas soluciones, por lo que comenzó a sentirse psíquicamente cansado. Toda esta filosofía de mercadillo no le estaba llevando a ningún lado y comenzaba a dolerle la cabeza, quizá por seguir teniéndola pegada al cristal.

La despegó y sintió un pequeño desperar despierto. Miró el paisaje por primera vez y se frotó los ojos. Ya estaba en el extrarradio y había mas verde que gris en el paisaje."Vuelvo a mis orígenes. Donde todo comienza, todo puede cambiar y comenzar de nuevo, el centro de la espiral."

Luas vio la luz por primera vez en el establo de la granja de su abuelo, un día en el que un profeta que nadie recuerda ya predijo que sería el fin del mundo. La abuela de Luas, de nombre Svetlana, trató de matar al bebé con un rastrillo cuando toda la familia dormía. La gracia divina detuvo su mano en el último momento y la fulminó de un ataque al corazón. La asociación de vecinos campestres se conmocionó fuertemente debido a la noticia, y se lanzaron a la caza del niño, al que creyeron la encarnación del mismísimo diablo. Picos, palas, azadas y cuchillos en alza avanzaron en procesión por los campos de trigo que circundaban las instalaciones de la familia de Luas, obligando a la madre del recién nacido a abandonar la granja a escondidas para evitar la masacre. Luego fue cuando ocurrió todo lo demás...
"Mamá..."

- ¡Señó! - Towanda hablaba atropelladamente, tras ella Luas veía las ruinas y ceniza a la que había sido reducido todo, el establo, la casa, y los campos de cultivo. Igual que años antes, exactamente igual. - De ve'dad que no pudimo hase nada. El hombre aparesió de la nada y hasiendo un gran fussssssssshhhhh lansó una gran llama de fuego que quemó todo el cultivo de marijuana señor. No pudimo hasé nada. Después de insendiar el cultivo muchos de los hombres más fuertes quedaron atontaos por la gran humareda, ¡Una gran humareda señó! No pudimo hasé nada. De ve'dad que fue terrible, terrible. Al día siguiente po' la mañana encontramos un...

Bang. Disparo en la cabeza. A tomar por culo. Así era Luas en los momentos de máxima tensión cosmológica. Cuando un par de personas piensan que se acerca el fin del mundo, esa noticia vuela hasta China. En pocos días, el estado mayor de algún país activaría los misiles nucleares y el Nigrojaque habría ganado. Por tanto, Luas se tenía que ahorrar los medios si realmente venía el fín del mundo. No era la primera vez que le pasaba. "Mal día chico. Otro día tendrás mas suerte, ya sabes lo que pasa cuando se termina el mundo"

Cuando el mundo se termina todo corre muy deprisa. No tienes tiempo de pensar y si fallas un sólo paso no llegarás a tiempo. Si no llegas a tiempo ocurre que no te salvas. Si no te salvas ardes en el infierno hasta la eternidad... Y Luas no quería eso para él, ni quería eso para Javichulo. la muerte de Towanda era sólo la primera, después de ello vendrían muchas más. La sangre corre por la ciudad y Luas se encuentra en un puente sobre ella, contemplándola correr bajo sus pies.
No sería todo tan macabro si la mente de Luas no estuviera enferma, infecta de problemas.

Después de todo el jaleo, Luas se limpia la sangre de Towanda que tiene encima. El final toca a la puerta, Borjamari. Eso pensaba Luas al borde de una depresión. En ese momento, en cambio, Borjamari estaba apunto de sentirse una persona normal después de haber violado a una desconocida. Esta claro que eso no lo sabían ni Luas, ni Miki, ni nisiquiera el Nigrojaque. El único que tenía costancia de esta información tan relevante para traducir esté puzzle idealizado que había construido Luas, era Javichulo. La desconocida, evidentemente, era un señuelo de Javichulo para despistar. Antes de que llegase el anticristo, Javichulo tenía que hacer de mesías una vez más en honor a su integridad física.
-¿Que milagro tengo que hacer ahora?
Ni siquiera Jesucristo tenía tan clara su función. Javichulo sabía que haría historia, ya fuera para bien o para mal, y estaba dispuesto a hacerlo. En un momento de reflexión, fue consciente de que él era el personaje más importante de toda esta trama de corrupción, sexo y drogas.
Se metió en un bar y pidió unos churros y un chocolate.
-No se lo voy a pagar. Le dijo Javier al camarero. Éste aceptó sin rechistar, y se lo sirvió en bandeja de oro y taza de plata.
Aqui nadie entiende nada, y yo estoy más perdido que nadie. Cuando el destino está en tu mano, y se debe decidir en minutos, hay dos posibilidades.
La primera es que reacciones correctamente, seas un heroe y todo el mundo se salve.
La segunda es que actúes como cualquier ser humano. Te empanes, y te sientes a comer churros.
Éste es el caso, y ésta es la situación. Comiendo churros, Javichulo pensó que ya estaba harto de estar siempre huyendo. Si él tenía las claves para solucionarlo todo, debía hacer algo ya mismo. Sale del bar y se dirige al edificio Luas y sus problemas.

Al pie del edificio Javichulo no parecía más que una hormiga a los ojos de un humano. Un insignificante punto en el asfalto. Entra en el hall y nadie le dice nada; nadie le mira. Presiona el botón de la planta 73 y el ascensor comienza a ascender.

Las puertas se abren, luz cegadora. Se encuentra al lado de Sebas, el Nigrojaque. Frente a ellos se encuentra Luas, escupiendo sangre y con un revolver en la mano.

4 disparos. Javichulo piensa: "Mi muerte!.." Se levanta sudoroso en su cama. Bueno, no sabe si en su cama o en la de cualquiera. Se mira las manos y están llenas de barro, no sabe si son sus manos. Se mira la pantorilla toda mojada pero no sabe si realmente se ha meado encima.

Está claro que todo esto sucede en la cabeza de Javichulo. Sus ojos medio en blanco viajan a medida que va subiendo el ascensor que sólo consta de su presencia. Reacciona. Estás sólo dirigiendote a la planta 73. Abres la puerta. Los cristales siguen rotos. No hay nadie. Mucho frío.

Mientras tanto Borjamari caminaba por la sexta avenida tras dejar a Miki con el Nigrojaque. La cosa vino así:

- Miki, debemos ir a ver el Nigrojaque - Borjamari.
- ¿Qué dices? Él es nuestro enemigo natural. Si lo veo, lo mato. - Miki enfurecido.
- Estais locos, soltadme por favor... ¡os lo suplico! - Estrella aún conmocionada por la situación.
- A callar zorra. Aquí sólo te salvará Javichulo. El tiene la respuesta de todo - Borjamari con un tono voraz.
- A ver, Borjamari. Explicame porque tenemos que ir a ver la Nigrojaque... - comenta Miki.
- Mira... Déjate de preguntas que me tienes harto. Tu solo eres el matón, el típico tio grande que cumple órdenes. ¿Por qué no miras cualquier película y aprendes un poco?
- Pero si...soy ingeniero, y tu solo eres un pobre adicto a la marihuana.
- No te equivoques. Lo mio es la música. Lo de la hierba solo me facilita el camino.

A Miki todo esto le daba igual, pero Estrella, categorizando a sus secuestradores de inútiles desorganizados, se decidió a actuar.

-Chicos- empezó - ¿No os habeis preguntado el porque de todo esto? Yo no conozco a ningun Javichulo y a Luas sí, le conocí hace tiempo y reconozco que es "bastante atractivo". Pero vosotros pareceis gente legal, chicos buenos, pero confundidos. Me siento cómoda con vosotros así que voy a confesaros algo.

Borjamari, que asimiló las palabras "legal, buenos, cómoda y confesaros" como "hoy toco tetas" escuchaba atentamento. Miki, que no tenía ni un pelo de tonto, pero muchos pelos hormonados, se empalmó y no dijo nada.

Prosigue Estrella: - ¿Porqué no pasamos un poco de todo esto y vamos los tres a tomarnos algo a mi casa? Seguro que os gusta divertiros, ya me entendeis.
Los dos se miraron con más complicidad de la que habían tenido hasta ahora. Miki aprobechó un momento fugaz para observar el escote de Estrella por el retrovisor. Ella le cató, ganando seguridad.

- Pero...el nigrojaque...dudó Borjamari.
- Mirad, no se quien es ese, pero si es amigo vuestro, seguro que también será buena gente.
Estrella se desabrocha un boton de la blusa manchada de sangre, Miki capta la indirecta, le va a estallar el miembro y, antes de que eso ocurra, pega un frenazo y cambia de dirección.
- A VER ¡¿DONDE VIVES JODIDA PUTA?!
-¡ ¿Pero qué coño haces Miki?! - Chilla Borjamari, intentando fijar su culo en el asiento mientras la fuerza centrífuga le lanza sobre los pechos de Estrella, los cuales aprovecha para lamer disimuladamente. Estrella no se da ni cuenta, su cara está aplastada contra la luna. Borjamari se incorpora, es consciente de la poca estabilidad de Miki. - ¿¿Eres gilipollas?? ¿Quieres matarnos? Eres un puto peligro, ¡¡haciendo estas cosas en una vía urbana!! Pero, ¿En qué coño piensas, joder? ¡Dios! Podría haber pasado un niño pequeño cruzando la calle, ¿lo sabes no? Un padre de familia, el puto presidente, no sé... ¡Luas mismo!
- Luas no puede estar aquí, Luas está con el Nigrojaque y Javichulo. Luas está ahora mismo determinando su destino, y por consiguiente, el destino del planeta. - Contesta Estrella, con mirada seria.
Miki y Borjamari se quedan flipados, hacía un rato Estrella no sabía nada del Nigrojaque y les había estado calentando los paquetes hasta el punto de hacer arder sus pantalones. Realmente era una mujer muy voluptuosa, es comprensible... Pero, ¿A qué viene todo esto?
- ¿A qué viene todo esto? - Borjamari es el primero en hablar, Miki está intentando retomar el control del coche que aun se zarandea violentamente consecuencia del segundo volantazo que ha pegado, víctima de la emoción. - ¿Quién eres?
Estrella sigue con la misma mirada, impasible, sin ningún tipo de significado, completamente vacía. Abre la boca muy lentamente, y de ella comienza a salir un líquido verde viscoso, mezclado con sangre coagulada. Ni un sólo sonido, únicamente el chof chof sobre el vestido de Estrella.
Miki lo ve todo por el retrovisor y se marea, las arcadas le llegan desde lo más profundo de su estómago. Borjamari no sale de su asombro, ni siquiera se inmuta cuando las segregaciones le manchan los zapatos de piel. Estrella tiene los ojos blancos, el grifo se cierra y comienza a asomar una babosa del tamaño de un melón, color rojo fuego. Miki no puede más, echa la raba ahí mismo y el coche choca contra un autobús escolar.

Niños corriendo huyen del estropicio. El golpe ha sido leve, pero Miki se ha tragado casi toda su pota. En el asiento trasero Borjamari continúa cuestionándose la razón de su existencia, a la vez que su vida le recuerda lo desgraciado qué es. Puta mierda de accidentes, a uno le transforman y le transportan a un nuevo mundo. Así mismo, el propio Borjamari continúa en su mundo. Por suerte, ningun niño salió herido, pero unas cuantas madres cayeron en estado de shock con el espectáculo. Estrella desenfundó un revolver, cuatro tiros al aire, y todo el mundo a callar.
-Lo siento chicos- dijo- se que he tardado mucho en continuar con el hilo, he estado en otro mundo.
Nadie entendía nada pero daba igual, ella tenía un arma.
-El hilo de esta historia comienza y acaba con Luas, y está cosido a Javichulo. Yo era la aguja y estoy dispuesta a clavarme en el ojo de cualquier hijo de puta, así que escuchadme. Ahora mando yo. Vamos a acabar con esto así que tu, grandullón, y tú, jodido loco, veniís conmigo y me haceis puto caso. Vamos a matarlos a todos, Luas, Javier, Jose, Nigro....a todos.

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